En los Misales y en los Órdines más antiguos de esta Estación el título es "ad Petrum Cyriacum", atestiguado ya en el siglo V y VI que se encontraba "cercano a las Termas de Diocleciano", en la zona de la actual vía XX Settembre. De la iglesia antigua existen restos notablesen los subterráneos. Aquí los antiguos quisieron colocar la "custodia militaris" de la cual habla el Apóstol de las gentes, tras ser desembarcado en Puzzuoli llegó a Roma y durante dos años permaneció aquí y recibió de los cristianos para darles consejos y también para escribir cartas. Una análoga tradición antigua quiere que también aquí sea donde san Pedro y los evangelistas Lucas y Juan estuvieran también. Entrando en el templo a través del vestíbulo de la fachada, comisionado a Pietro da Cortona por el Papa Alejandro VII, la iglesia muestra obras de arte y las monumnetales tumbas de los Bonaparte. Aquí fueron transportadas en el alto medievo las reliquias del Mártir Ciriaco desde la vía Ostiense. La estación de este día fijada en una de las más bellas iglesias del centro de Roma, lleva a elevar el espíritu en un himno secular de gloria a la Virgen y, con las reliquias de los Mártires aquí venerados, recuerda como es necesario buscar al Señor para escuchar su palabra y amarlo siempre más. *
(Traducción del original italiano: Salvador Aguilera López)